Carmen Navarro: aprendemos de la mano de una institución en el mundo de la estética y la belleza
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27 ene
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CARMEN NAVARRO - INSTITUCIÓN EN EL MUNDO DE LA ESTÉTICA Y LA BELLEZA
EL PASADO AÑO, CARMEN NAVARRO CELEBRABA EL CINCUENTA ANIVERSARIO DE SUS CENTROS. TODA UNA VIDA DE DEDICACIÓN DE ESTA DAMA DE LA BELLEZA QUE COMENZÓ CREANDO UN MÉTODO QUE SE HA CONVERTIDO EN AUTÉNTICA REFERENCIA PARA LOS PROFESIONALES DEL SECTOR.
TRABAJO, PROFESIONALIDAD Y LA TECNOLOGÍA MÁS PUNTERA SON LAS NOTAS DISTINTIVAS QUE ACOMPAÑAN LA TRAYECTORIA DE ESTA GURÚ DE LA ESTÉTICA, JUNTO A UNA PASIÓN DESMESURADA POR LOGRAR LA MEJOR Y MÁS SALUDABLE IMAGEN DE LA PERSONA. CONSIGUIENDO LA EXCELENCIA EN TODOS LOS TRATAMIENTOS QUE PROPORCIONA, NO HAY QUE DEJAR APARTE A LOS EQUIPOS QUE HA VENIDO FORMANDO A TRAVÉS DE LOS AÑOS Y QUE HAN SIDO PARTE DE ESA OBRA MAGISTRAL QUE HA LOGRADO EN ROSTROS Y CUERPOS.
¿Tenía claro en su juventud que quería dedicarse a la belleza?
No, en absoluto, y en aquella época menos. Siempre cuento que mi padre nunca imagino que ninguna de sus hijas trabajaría y menos que se dedicara al mundo de la estética. Eran además otros tiempos, en los que hacía falta el consentimiento de tu marido para conseguir un préstamo. Lo único que sí recuerdo es que de pequeña soñaba y jugaba a ser empresaria. Y, cosas de la vida, se convirtió en realidad.
¿En qué momento se hace empresaria de este sector?
Empecé en 1973, pero nunca con el afán de ser empresaria. En aquel momento no era consciente de estar creando lo que hoy es una realidad. Siempre fui poco a poco. En España no existía nada parecido, solo había pequeños centros de estética o salones de peluquería que incorporaban algunos servicios de estética. Pero cuando comencé y desarrollé este concepto de “bienestar holístico”, no había nada parecido. Así que fui creciendo sin ser consciente de hacerlo.
¿Cómo pensó en la piel como base de su trabajo?
Conocí este mundo por casualidad. Así que nunca lo imaginé.
¿Cuál fue el primer paso en esta trayectoria?
El primer paso fue dar un curso de estética con Blanca de Barberá. Ella se dedicaba a formar y fue tan interesante lo que aprendí de su mano que decidí seguir buscando. Una búsqueda que inicié hace más de cincuenta años y en la que estoy inmersa. Me apasiona.
¿Por qué la belleza holística? ¿En qué basaba esta apuesta?
Cuando empecé me di cuenta de que no se podía trabajar por partes. Siempre he creído y defendido la belleza holística. Si no estamos bien por dentro, no podemos estar bien por fuera. Pero es indudable que si combinamos las terapias manuales con los ingredientes activos más potentes estaremos activando la microcirculación, aumentando la capacidad de la piel para absorber los ingredientes activos y los nutrientes y elevando sus niveles de oxígeno. Habremos conseguido el efecto buscado, con total naturalidad sin olvidarnos de los grandes beneficios que aporta una terapia manual a nuestro estado de ánimo. Todo suma. Pero, es indudable que quienes se ponen en nuestras manos buscan en nuestra manera de entender la belleza un bienestar general que se ve y se siente más allá del espejo.
¿Cuál fue su primer objetivo en esta andadura?
No había objetivo, solo fui enamorándome de este mundo y viendo la importancia que tenía en el bienestar de las personas; cómo incidía incluso en su salud. Si no te sientes bien, si lo que ves reflejado en el espejo no te gusta, si tu autoestima está pasando por un mal momento, no puedes ser feliz. Está demostrado que la autoestima influye en todos los niveles: laboral, personal…, y también afecta, por supuesto, a la hora de relacionarnos con nuestro entorno. Ver los resultados que los tratamientos conseguían en nuestras clientas a todos los niveles me hizo seguir buscando las mejores terapias para obtener los mejores resultados. Ese ha sido siempre mi objetivo: la búsqueda de la excelencia.
¿Qué la lleva a interesarse por las técnicas orientales? ¿La meditación fue una de ellas?
Al viajar fui descubriendo esas técnicas que en España eran tan desconocidas. Hice cursos de shiatsu, reflexoterapia podal, control mental…, incluso podría decir que “eduqué” -desde un punto de vista cariñoso- a mis clientes para que aprendieran a valorar la sensorialidad de nuestros tratamientos y de las fórmulas de cada cosmético. Es fundamental la asociación que hacemos cuando disfrutamos de una experiencia y nos deja ese recuerdo evocador que viene ligado a un aroma, a unas sensaciones, incluso a la intensidad de luz empleada. Todo suma a la hora de acostumbrar a nuestros sentidos a reconocer que están entrando en un espacio dedicado al bienestar absoluto.
Fue pionera en aquello de “la experiencia más allá de los cuidados estéticos”. También en el poder de las manos como sello de identidad diferenciador de su trabajo.
El poder de las manos es clave. Igual que trabajamos los otros sentidos, las manos nos guían y nos descubren cosas que no se ven a simple vista, algo que acabo de revivir con “Diamond Corner”. Vuelvo en cierto modo a mis orígenes porque en mis comienzos, cuando solo contaba con la herramienta de mis manos, realizaba tratamientos en los que llegaba a perder la noción del tiempo. Todos conocéis de sobra mi pasión por este mundo y de manera especial por las terapias manuales. Ellas son las grandes protagonistas de “La Boutique”. Realizamos protocolos de hasta dos horas con el objetivo de conseguir no solo los mejores resultados sino también la máxima relajación de nuestros clientes.
¿Cuál es el tratamiento/os más vanguardistas que tiene en la actualidad en sus centros?
Las terapias con luz y aquellas que nos ayudan a trabajar además de dermis, epidermis…, pero también la musculatura. Son aparatos de última generación que recolocan basados en la elecromagnetoterapia y las técnicas que trabajan a nivel neuromuscular. En el caso de “Diamond Corner” realizamos además una cuidada selección para implementar los conocidos como protocolos Gold o, lo que es lo mismo, los más exquisitos y exclusivos.
¿Qué momento atraviesa la estética a nivel global y que futuro augura a la misma?
Estamos a la vanguardia. Es uno de los sectores que más ha avanzado. Y ahora contamos con herramientas increíbles para seguir estando a la última. Puedo hablar de mi caso y de cómo luchamos a diario para ofrecer siempre lo mejor a nuestros clientes. Sigo formándome a diario (ahora con la ayuda de las videoconferencias y de los cursos online tengo al alcance muchas herramientas que antes solo se podían adquirir viajando o asistiendo de manera presencial), y hago cursos prácticamente a diario tanto de técnicas e innovaciones cosméticas como de coach, preparación de equipos, técnicas de marketing y ventas… Hemos evolucionado mucho. Y, por supuesto, seguimos poniendo en práctica todas las destrezas manuales que tantos beneficios aportan a nuestra salud y belleza. Seguro que hay escondidas técnicas ancestrales a las que todavía no hemos sacado el suficiente partido y ahí estamos los profesionales del sector para ponerlas en valor. Por eso es clave formarnos y disfrutar con cada pequeño descubrimiento.
Son muchos los tratamientos que ofrece a sus clientes. ¿De cuál o de cuáles está más orgullosa?
La combinación entre la vanguardia y las técnicas manuales es la clave. Siempre estamos a la vanguardia en la última tecnología, pero si tenemos que destacar algo que nos ha diferenciado en el sector durante toda nuestra vida profesional, ese “algo” es el uso que hacemos de nuestras manos. Son las técnicas manuales, la manera de incluir estas terapias en nuestros protocolos, las que nos han traído hasta aquí. Es indudable que la ciencia y la tecnología nos han traído hasta aquí, y ahora son imprescindibles (como contaba anteriormente, lo más vanguardista son las terapias con luz y las que nos permiten trabajar más allá de la dermis y de la epidermis, llegar hasta la musculatura con aparatos de última generación que recolocan, como la elecromagnetoterapia y las técnicas neuromusculares).
¿La eficacia es siempre una realidad?
Se trata de buscarla siendo consciente de que cada persona y cada caso es un mundo. Por eso la importancia de la personalización para buscar la máxima eficacia en cada protocolo. Siempre digo que no hay tratamiento estrella: la estrella para nosotros es el cliente. Son las necesidades de la persona las que nos hacen elegir la mejor combinación para dar solución a todo lo que le preocupa en ese instante. Y en ese caso sí se encuentra la eficacia.
¿Cree que se puede acabar con la flacidez, uno de los problemas, tanto faciales como corporales, que provoca el paso del tiempo y el envejecimiento, aunque haya casos en etapas anteriores?
Van de la mano. Hay medios para trabajar contra la flacidez. Solo hace falta constancia. Es cierto que, con el paso del tiempo, se convierte en una preocupación estética de consulta obligada en los centros de belleza. ¿Cómo puedo combatir la flacidez? Y la respuesta no es única, ya que solo la suma de una dieta saludable, acompañada de ejercicio y, con la ayuda experta de protocolos personalizados, puede darnos los resultados esperados. Lo primero que debemos saber es que la flacidez es un reflejo de la pérdida de elasticidad y firmeza. Tanto en el tejido muscular como en la piel. La flacidez cutánea, por ejemplo, se muestra cuando se va reduciendo la presencia de colágeno. La muscular es una muestra de que nuestras fibras musculares están perdiendo la capacidad de sujeción que mantenía todo “en su sitio”.
Pero no nos olvidemos de la causa fundamental de la flacidez: el envejecimiento. A partir de los treinta años la producción de colágeno se reduce. Y con ella desaparece poco a poco la sujeción de los tejidos. A eso podemos añadir otras causas como las pérdidas de peso o la falta de ejercicios tanto a nivel corporal como facial, que causan también estragos. La conclusión es sencilla: hay que trabajar duro para mantener la flacidez a raya.
¿En cabina qué es lo más recomendable?
Trabajar con radiofrecuencia es todo un acierto. Hay personas que musculan mucho, van al gimnasio, hacen mucho deporte, pero el tejido está flácido. El músculo bloquea la circulación sanguínea y linfática y no llegan bien los nutrientes a nivel superficial. Conseguimos grandes resultados cuando se trabaja con constancia. ¿Lo último? HERA. Se trata de una radiofrecuencia revolucionaria. Consigue un efecto uniforme desde las capas más superficiales de la piel hasta las más profundas. Su sistema de “Cell Care System” canaliza a través de cuatro tipos de entrega de energía todo su poder desde el interior para llegar al máximo esplendor en el exterior. También nos funciona empezar con LPG, porque es el único aparato que crea ácido hialurónico, con lo que conseguimos redensificar el tejido y, al combinarlo con radiofrecuencia, estimulamos el colágeno y la elastina.
La batalla contra las arrugas, ¿está ganada?
Estamos en el camino. Hemos avanzado mucho, pero seguimos en ello. Hay que tener en cuenta que en la batalla contra el envejecimiento debemos trabajar pensando en un 360 para que los años no se reflejen en nuestra piel. Las arrugas podemos minimizarlas, pero no son la única prioridad. Y para conseguirlo, lo primero que debemos tener en cuenta es que ya no vale todo. Una de las prioridades es mantener la naturalidad y los rasgos personales. ¿Cómo lo hacemos posible? Gracias al “envejecimiento dirigido”. De esta forma, iremos corrigiendo los estragos que el tiempo provoca en la piel, incluso podemos adelantarnos a ellos, pero lo haremos de manera sosegada, sin obsesionarnos, dirigiendo los cambios que se producen hacia una mayor armonía. Es decir, se trata de envejecer, sí, pero con cabeza y con las técnicas más punteras.
Las máscaras con luz están de plena actualidad tanto en centros como en hogar. ¿Qué opina de esta tecnología y qué resultado está dando Fhos Procyon en sus tratamientos? ¿Cuál es su protocolo?
Siempre recuerdo que la aplicación de la luz a los tratamientos de belleza viene de lejos. Cuando hace años empecé a introducir la luz led en los tratamientos en cabina, muchos escépticos dudaban de su eficacia. Hoy, lejos de cuestionarlo, esteticistas, médicos y profesionales de la salud lo incorporan en sus protocolos por su demostrada eficacia. Y desde entonces ha avanzado mucho más. Nuestra última incorporación así lo demuestra. Es el caso de “Fhos Procyon”, sin duda el tratamiento revolucionario de la temporada y que otorga resultados incomparables a la velocidad de la luz. ¿Cómo? Gracias a una plataforma lumínica multidisciplinar que va mucho más allá de un IPL convencional. A través de un filtrado selectivo se aplican en la piel pulsos de luz de amplio espectro, y los cromóforos diana de la piel la absorben y lo transforman en calor terapéutico. Es un tratamiento no invasivo, indoloro y sin efectos secundarios ya que estamos hablando de un tratamiento no ablativo con luz pulsada intensa, que constituye una alternativa terapéutica contrastada para el tratamiento de la piel envejecida o con alteraciones. Además, con resultados visibles desde la primera sesión y en tan solo quince minutos. Las partículas bioluminiscentes están dotadas de numerosos activos encapsulados que, aseguran una penetración óptima e incomparable, llegando a las capas más profundas de la piel. Garantizamos así la aplicación de la energía de manera precisa y constante.
¿Qué podemos tratar con Procyon?
A nivel facial es perfecto para tratar todas aquellas preocupaciones que nos surgen después del verano y que debemos trabajar en otoño como son las manchas y el rejuvenecimiento facial. Es ideal para mejorar múltiples lesiones cutáneas propias del fotoenvejecimiento, tales como lesiones pigmentadas epidérmicas y dérmicas. El resultado es una piel con un tono mucho más uniforme y un aspecto más rejuvenecido desde la primera sesión. También es perfecto para tratar las pieles comedogénicas, impuras, y realizar un tratamiento de higiene facial. Además, se trabaja con cosmética específica, Fhos, formulada con ingredientes bioluminiscentes que consiguen profundizar y que los resultados sean profundos, visibles y duraderos. Podemos tratar dermatitis, rosácea, acné, luminosidad, flacidez, antiaging, trabajar volumen facial y sensibilidad.
A nivel corporal es ideal para combatir celulitis, disminuir volumen y reafirmar tejidos. Elevamos glúteos, gracias a la firmeza que aporta el tratamiento; definimos piernas, reduciendo celulitis y volumen; logramos vientre plano; reducir flacidez y estrías; trabajar alas de murciélago en brazos… El número de sesiones recomendadas, según diagnóstico, para tratamiento de choque, es de una semanal durante un mes y el precio por sesión es de ciento sesenta y cinco euros.
¿La estética poco o no invasiva viene ganando terreno al quirófano?
Es así. Buscamos la naturalidad y los pasos por quirófano restan ese toque de personalidad. A todos nos gusta vernos jóvenes y que nos digan que aparentamos menos edad de la que nuestro carnet de identidad refleja, pero eso no quiere decir que debamos hacerlo a cualquier precio. Aunque hay personas obsesionadas con rejuvenecer de manera drástica, ese no ha sido nunca el objetivo de mis centros. De hecho, cada vez son más las personas que se ponen en nuestras manos para conseguir que sus años no se reflejen en su piel, pero confían en nosotros porque saben que lo haremos con naturalidad y manteniendo la belleza de su personalidad. Y para conseguirlo, lo primero que debemos tener en cuenta, es que ya no vale todo. Una de las prioridades es mantener la naturalidad y los rasgos personales. ¿Cómo lo hacemos posible? Gracias al “envejecimiento dirigido”. De esta forma, iremos corrigiendo los estragos que el tiempo provoca en la piel, incluso podemos adelantarnos a ellos, pero lo haremos de manera sosegada, sin obsesionarnos; dirigiendo los cambios que se producen hacia una mayor armonía. Es decir, se trata de envejecer, pero con cabeza y con las técnicas más punteras.
¿Qué es para Carmen Navarro el lujo?
El lujo es la atención, hacer sentir única a la persona que se pone en nuestras manos. La máxima expresión, la auténtica dimensión del lujo, acabamos de convertirla en realidad con nuestro centro “Diamond Corner”. Es un centro boutique, el lugar en el que el lujo y la perfección se aúnan para conseguir los protocolos más sublimes y obtener los mejores resultados. ¿Qué es Diamond Corner? Pues el lugar en el que la excelencia se convierte en belleza. Aquí se va a encontrar la selección de aquellos protocolos que considero excepcionales tanto por sus técnicas como por la cosmética y los resultados que conseguimos. Buscamos que las personas que acudan a este centro, a la Boutique de Carmen Navarro, se evadan y encuentren su espacio. Por eso hemos prolongado la duración de esos tratamientos buscando el equilibrio entre los mejores resultados y la mejor experiencia. Aquí también se va a encontrar ese halo que siempre ha caracterizado nuestros protocolos, inspirados en mis viajes, especialmente en Oriente, el lugar del que importé sus conocimientos para crear nuestro concepto de belleza holística. Quien acuda a este rincón bombonera, encontrará la suma de un espacio delicado con la selección de los tratamientos magníficos de Carmen Navarro. ¿El objetivo? Ofrecerle el lujo que su piel necesita.
¿Qué balance hace de su trayectoria en este momento?
Solo puedo decir que soy feliz después de tantos años. Siempre lo he sido, disfrutando al máximo de este trabajo que me apasiona, y quiero seguir haciéndolo, viviendo en paz y armonía, tan necesarias para encontrar el equilibrio. Creo que el secreto para cualquier profesional es amar lo que hace y a mí me apasiona. La pasión y la constancia han sido y son claves en mi día a día. Cualquier obstáculo que aparezca en el camino resulta mucho más fácil de solucionar cuando lo que haces, a lo que dedicas la gran parte de tu jornada, te hace feliz.
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