Especial Mujeres - (2/5) María Li Bao

El 8 de marzo es una fecha que ya no necesita explicación, pero eso no impide que sigamos descubriendo y dando visibilidad a historias de trabajo, esfuerzo y éxito. Eliminando tópicos, más allá de mensajes grandilocuentes, queremos que conozcas a algunas de las mejores exponentes del liderazgo femenino. Estos perfiles han redefinido y dado visibilidad al éxito en sectores clave tan diversos como la justicia, la moda, la tecnología, el motor o la gastronomía. Grandes mujeres que han visto y ven cómo el mundo avanza bajo sus valores, marcando el ritmo. 

Para celebrar este día, esta semana hemos preparado un ciclo de 5 entrevistas, una por día, con perfiles de gran relevancia es estos campos. Conoceremos sus comienzos y trayectoria; sus aprendizajes y visiones. Pero, sobretodo, homenajearemos su impacto y liderazgo en un mundo que, gracias a ellas, está en constante cambio. 

MARÍA LI BAO 

Fundadora del Grupo China Crown 

¿Qué le inspiró para crear el grupo China Crown y cómo comienza este proyecto? 

China Crown nace de una necesidad personal y profesional: traer a España la auténtica cocina china, pero con un enfoque moderno y sofisticado. Cuando llegué aquí, me di cuenta de que la gastronomía china estaba muy encasillada en un concepto que no representaba la verdadera riqueza culinaria de mi país. Quería cambiar esa percepción, elevar la cocina china a la categoría que realmente merece y ofrecer una experiencia gastronómica única. Así empezó todo, con mucha pasión y la convicción de que podíamos hacer algo diferente. 

¿De qué manera la experiencia personal y cultural influyen en la creación del grupo? 

La cocina siempre ha sido parte de mi vida. Crecí rodeada de sabores, de recetas que pasaban de generación en generación. Esa tradición la llevé conmigo cuando me instalé en España. Mi familia tenía restaurantes, y desde pequeña aprendí que la gastronomía no es solo comida, sino historia, cultura y emoción. Con China Crown y el resto de los restaurantes del grupo, he intentado transmitir esa esencia, pero adaptándola a un concepto más sofisticado y contemporáneo. 

El mundo de la gastronomía asiática está muy explotado. ¿Cómo lograr fusionar la esencia de la cultura china con el mercado global y mantener una identidad auténtica? 

El secreto está en el respeto por la tradición y en entender cómo innovar sin perder la esencia. No se trata solo de ofrecer un plato bien ejecutado, sino de contar una historia a través de la comida. En nuestros restaurantes trabajamos con ingredientes de la mejor calidad, técnicas tradicionales y una presentación cuidada, pero sin perder la autenticidad. Además, la experiencia que ofrecemos va más allá del plato. El ambiente, la decoración, la vajilla… todo está pensado para sumergir al comensal en la verdadera China, pero con una visión moderna. 

Después de 30 años en el mundo de la hostelería, ¿cómo siente que ha evolucionado el concepto? 

Cuando empecé, el público tenía una visión más limitada de la gastronomía china. A lo largo de los años, he visto cómo la gente ha ido abriendo su mente, apreciando más la cocina de calidad y entendiendo que China tiene una diversidad gastronómica impresionante. Mis conceptos han evolucionado en esa línea, buscando siempre la excelencia y explorando nuevas maneras de sorprender sin perder la esencia. Antes, un restaurante chino en España era sinónimo de ciertos platos muy estereotipados; ahora hablamos de fine dining, de experiencias gastronómicas, de historia en cada bocado. 

¿Hubo algún momento decisivo dónde pensar que China Crown podría convertirse en lo que es hoy? 

Hubo muchos momentos clave, pero quizás uno de los más importantes fue cuando decidimos apostar por la alta gastronomía china en un país donde no existía este concepto. Sabía que era un reto, pero también que, si lo hacíamos bien, podía marcar un antes y un después. Ver la respuesta del público, el reconocimiento de la crítica y la fidelidad de nuestros clientes me hizo darme cuenta de que íbamos por el camino correcto. 

¿Qué aspecto de la cultura china está presente en el trabajo que realiza? 

Muchos, pero sobre todo el respeto por la tradición, la disciplina y la búsqueda constante de la excelencia. En la cultura china, la comida no es solo alimentación, es un ritual, una forma de honrar a la familia y a la historia. Cada plato tiene un significado, cada ingrediente una razón de ser. Eso es lo que intento reflejar en cada uno de nuestros restaurantes, desde China Crown hasta Shanghai Mama o Lelong Asian Club. 

Ha tenido que enfrentar diversos obstáculos en el camino. ¿Cuáles diría que han sido los mayores desafíos? 

Uno de los mayores desafíos ha sido romper con los estereotipos sobre la comida china. Durante años, se ha tenido una idea muy limitada de nuestra gastronomía y ha costado hacer entender que China tiene una de las cocinas más sofisticadas del mundo. También ha sido un reto gestionar el crecimiento del grupo, mantener la calidad en cada uno de nuestros restaurantes y seguir innovando sin perder la esencia. Además, por supuesto, de la captación de personal. 

Como mujer emprendedora de éxito, ¿qué consejo daría a las nuevas generaciones de empresarios, especialmente aquellos que quieren seguir un camino similar al suyo? 

Que crean en su visión y no tengan miedo de apostar por algo diferente. La hostelería es un mundo apasionante, pero también muy exigente. Hay que trabajar con pasión, con disciplina y con mucha paciencia. No todo sale bien a la primera, pero si tienes claro tu objetivo y trabajas duro, los resultados llegan. Y, sobre todo, rodearte de un buen equipo. Sin un equipo comprometido y apasionado, es imposible crecer. 

Si además pudiera dar un mensaje a su yo más joven, ¿qué le diría en ese momento cuándo empezaba a dar forma a este proyecto? 

Le diría que confíe más en sí misma y que disfrute del camino. Que habrá momentos difíciles, pero que cada obstáculo traerá un aprendizaje valioso. También le diría que no tenga miedo de soñar en grande, porque con esfuerzo y determinación, los sueños pueden convertirse en realidad.