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Barras donde apetece quedarse

  • hace 1 día
  • 2 Min. de lectura

Entre pinchos, vinos y conversaciones, estas barras ofrecen todo lo necesario para un tardeo sin prisas y con todo el sabor de los momentos que se alargan sin esfuerzo. 

 

Y es que sentarse en la barra ya no es solo una solución práctica: es, cada vez más, una experiencia en sí misma. Es ese lugar donde confluyen buena bebida, ambiente animado y la posibilidad de disfrutar sin complicaciones, pero sobretodo donde se vive la energía del local con intensidad: se ve cómo se preparan los platos, se escucha el bullicio de fondo, se conversa con los de al lado —amigos o desconocidos— y se construyen recuerdos inesperados. 

 

En estos espacios, la atención cercana y la calidad del producto hacen que cada visita merezca repetirse. Porque no importa si se va para desconectar, compartir o simplemente saborear algo bien hecho, lo fundamental es ir. Estas son algunas de las barras de Madrid donde uno se sienta… y ya no quiere levantarse. 



Alto Bardero: pinchos, vino y buena vibra en La Latina 

En pleno corazón de La Latina, Alto Bardero se ha ganado en pocos meses un Solete de la Guía Repsol gracias a una propuesta cercana, sabrosa y sin pretensiones. Su barra, siempre viva, ofrece pinchos fríos y calientes que cambian constantemente.  


Los chefs León Bonasso y Pablo Paternostro fusionan sabores mediterráneos, latinos y asiáticos en una carta pensada para compartir: brioche de huevo trufado, tacos en tempura o gyozas con fondo de ramen. Todo servido en un ambiente relajado, con mesas altas, un comedor tranquilo y una filosofía pet-friendly. Con vinos naturales y de pequeños productores, Alto Bardero invita a quedarse, conversar y dejarse llevar.  




Barra Alta Madrid: sabores ahumados y cocina para compartir 

En el barrio de Salamanca, Barra Alta Madrid ofrece una cocina sencilla, pero con alma. Su barra se convierte en protagonista gracias a un fuera de carta basado en productos ahumados de Carpier, referencia de los ahumados artesanales desde hace más de 30 años.  


De la colaboración entre el chef Daniel Roca y Carlos Piernas nacen platos como la ensaladilla con salmón en conserva o el tartar de tomate con caballa ahumada. A ello se suma una carta repleta de clásicos modernos como las croquetas de foie, el bocata de calamares con roast pork o los tartares. Ambiente moderno, platos bien hechos y una barra que invita a compartir sin prisas.  




Kitchen 154: el caos delicioso de una barra con alma callejera

Kitchen 154 es sinónimo de sabor, ritmo frenético y cocina sin complejos. Con varios locales en Madrid, sus barras permiten vivir la acción de cerca: el fuego, los aromas, la música, el humo... y platos que despiertan todos los sentidos.  


Su propuesta recorre Asia sin mapas fijos, desde Vietnam hasta Tailandia, pero siempre con personalidad propia. La barra del Mercado de Vallehermoso es la más icónica y esa donde la experiencia se convierte en espectáculo: dumplings, costillas coreanas, alitas sweet chili, currys y un servicio tan directo como cercano.  


Su última apertura dirife a la calle del Conde Duque, donde destacan platos como los huevos Yum Kai Dao. Un lugar donde cada bocado se convierte en protagonista.  


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